Julie & Julia
31 octubre, 2010 4 comentarios
Hoy he visto una peli de chicas (o de chicos con novia los domingos por la tarde, o de fans incondicionales de Meryl Divinorum Streep, o de súper aficionados a la cocina y/o blogs).
¿Qué porqué es una peli de chicas? Bueno, cuenta en paralelo la historia de dos mujeres:
Julie Powell es una joven neoyorquina aficionada a la cocina, pero sobre todo a la comida, que vive una vida algo anodina y frustrada por haber dejado de perseguir su sueño de ser escritora. Para tratar de dar un sentido a su insípida existencia, comienza un blog en el que contará el desafío al que se va a enfrentar al tratar de cocinar todas las recetas del, al parecer celebérrimo, libro de cocina francesa de Julia Child en el plazo de un año.
Por otra parte asistimos a la fascinante historia de la propia Child y de cómo una ex funcionaria y esposa de un diplomático destinado en París se acaba convirtiendo en la introductora oficial de la cocina francesa en la Tierra de los Libres y el Hogar de los Valientes (con Kétchup) en los 50’, en escritora de un, más que best seller yo diría best cooker, y en uno de los chefs más conocidos de la televisión.
Ni que decir tiene que hasta hace unas horas yo desconocía por completo que jamás hubiera habido una mujer llamada Julia Child (lo más parecido que hemos tenido en España sería Elena embadurnada de harina Santonja, vamos digo yo…) y que había sido tan influyente para los estadounidenses. En cualquier caso os diré que era una mujer admirable que medía 1,88 m. de estatura y que tenía una voz tan chillona que podía hacer que se te cortara la mayonesa con solo pronunciar su famosa muletilla “Bon appétit!”, a la que la Streep recrea con bastante precisión, por lo visto:
Lo que más me ha interesado de la historia es el paralelismo entre ambas mujeres y, a la vez, con mi propia inquietud: el no-del-todo-descartado sueño de vivir de lo que salga de las teclas de mi PC –decir “de mi pluma” me parecía cursi, anticuado y pretencioso, pero pensándolo bien, toda la sección “Petarda Collection” sale directamente de mi escandalosa pluma…-.
Si las langostas gritaran, las mariscadas serían muy traumáticas…
Resulta curioso ver como ambas mujeres consiguen finalmente su objetivo de…
(Ah! lo siento, os he spoileado el final, pero creo que era predecible desde el primer fotograma dado el carácter de comedia amable que tiene la película y del hecho de que ambas historias son reales; aunque todavía quedan algunas sorpresas que no desvelaré, como que Julie no es sólo Julie sino también su propia madre manipuladora, castrante y psicópata y que Julia ha estado muerta todo el tiempo y en realidad es un fantasma que sólo la Crème Brûlée puede ver).
… convertirse en escritoras, cada una de ellas en un momento histórico muy diferente: mientras que Julia Child vivía en un mundo en el que había que depender del servicio de correo postal y las distancias, si no insalvables, cuando menos dificultaban bastante la comunicación, Julie Powell pudo llegar a cientos de personas de todo el mundo sin salir de su apartamento gracias a la magia de Internet. Mientras que ésta consiguió la fama en unos meses, a aquella le costo ocho años publicar su libro aunque finalmente también consiguió meterse en los hogares de millones de americanos gracias a la televisión.
La Meryl también se sabe la coreografía del “Baile de los Pajaritos”.
Aunque la película es correcta, no tiene gran trascendencia más allá de lo explicado y de la, como siempre, magistral interpretación de la Meryl (chicas, –y cuando digo chicas me refiero a Susan & Maddy-, a mí ésta ya me está oliendo con su cuasi perfección, ¡ni que fuera la única que tiene un Óscar! si ahora los regalan con las Tena Lady…, a la próxima reunión de ex shopahólicas anónimas, digo famosas, no la invitamos…), pero he pasado un buen rato creyéndome que todo es posible y que a lo mejor yo también consigo mi sueño: que me ofrezcan llevar a cabo El Club Pickwick: el Musical.
Pues nada, que ya estoy de vuelta…
Besos