En el diván con Madonna: Do you believe in love? Cause I got something to say about it…
20 enero, 2011 3 comentarios
[Lo de siempre: no me hago responsable de los cabreos que os agarréis cuando leáis esto y bla bla bla…No, en serio, esto va a doler…]
Criaturitas celestiales
No es que os haya abandonado en este mundo hostil y cruel (ya sabéis que normalmente yo sólo dejo mi rancho ficticio de Connecticut para ir de compras por Rodeo Drive en L.A. o quedar con Susan en el Salón de Té Ruso de NYC para despellejar, digo comentar, las carreras de nuestros estimados compañeros de profesión…) sino que tenía la necesidad imperiosa de pasar la ITV de este mi cuerpo serrano, y ya no se recupera una tan fácil de las operaciones de estética como antes…
Estaba yo ordeñando vacas (no sabéis lo polivalente y apañá que soy, que lo mismo gano un Emmy que asisto el parto de un ternero) y, por una extraña asociación me he puesto yo a pensar en eso del amor. No mucho rato, que os he dicho mil veces que si pienso mucho se me estropean las mechas, pero he sacado algunas conclusiones intrascendentes y totalmente absurdas de esas que no le van a servir a nadie, pero como el alquiler de Blogger lo pago yo (que soy la solvente, porque la niña muchas trascendencias, pero ná de ná…), pues digo lo que quiero, aún a riesgo de seguir recibiendo críticas (yo, ya me conocéis, me crezco en la adversidad, que si no me he muerto con lo que se dijo de mí con «La isla de las cabezas cortadas» es que soy inmortal…)
No sé por qué los videos salen negros, pero si hacéis click sí que funcionan… y hablando de negros, necesito uno que me arregle los formatos, porque mi talento se está desperdiciando en estas menudencias…
Frozen
You’re frozen when your heart is not open…
Esta maravillosa canción con gozosos arreglos de William Orbit se la dedico, para empezar, a todos aquellos profesionales del «estar muertos por dentro» (que no sabéis como se está reproduciendo últimamente en mi entorno esta subespecie de patéticas criaturas) y también a los que no creen en la pasión o reniegan del amor por su caducidad: a la Ciccone le gustaría derretir vuestro corazón, pero yo lo que haría es partiros la cara, sin concesiones.
Algún día no muy lejano, cuando seáis viejos y olais a pasas como el Sr. Friediksen os acordaréis de esto y os pondréis muy muy tristes. No os preocupéis, no será tarde, podréis coger a la primera anciana venerable y desdentada que os encontréis en la residencia y demostrarle que todavía os queda un ápice de vida. Tened cuidado a ver si os la cargáis con toda esa pasión reconcentrada.
Express Yourself
Don’t go for second best, put your love to the test…
Este clásicazo de 1989 habla de un principio fundamental: en el amor nunca hay que conformarse con menos que ser the one and only. ¿Es que esto hay que explicarlo más? Todos merecemos ser venerados, adorados e idolatrados, eso sí, sin necesidad de que nos miren como princesas cuando eructamos (jo, el que se acuerde de qué peli es eso que me lo diga, que no me sale en Google…)
Y si no es posible, siempre estaréis mejor on your own, hasta que alguien se dé cuenta de lo que realmente valéis y os aprecie con todos vuestros vergonzosos defectos (porque apreciaros por vuestras fascinantes virtudes no tiene ningún mérito, queridos…)
She’s not me
I know I can do it better…!
Pero si alguien sigue empeñado en haceros creer que hay otra persona que vale más que vosotros, nunca lo créais: simplemente será un opinión. Vuestro valor intrínseco no depende de nadie externo a vosotros mismos, de lo que os quieran u os dejen de querer.
Hallad en vuestro interior el tesoro de vuestra inalienable unicidad y nunca dejéis que nadie os lo robe. Y así lo dice la palabra de Dios en el estribillo de este temazo ultrasónico del álbum Hard Candy que cada día que pasa me gusta un poco más:
She’s not me
She doesn’t have my name
She’ll never have what I have
It won’t be the same
Y el que no lo quiera, él se lo pierde!!
Me voy, que me canso de ser tan sabia y tengo que preparar un apple pie.
Juas, juas… Si es que soy una máquina con el Google… Ya sé de donde viene esa cita que no recordaba, y la verdad es que es de una peli con mucha clase… Aquí lo tenéis FYI, a partir de 01:13… Jo, menuda pareja… http://www.youtube.com/watch?v=qDm7u83GYFk&feature=relatedLos que lo hubieran adivinado sin ayuda que se tomen un caramelito, que se lo han ganado…
Pensaba que te referías a la menina arroto que hay en youtube. Lo de usar Google es muy de Moss, cuando le dice Jen "te tengo que hacer una pregunta" y Moss dice "un momento… vale, ya he abierto Google, pregunta".
La madre que te parió! XDEl bueno de Moss, le echo de menos fíjate tú…