Otro “momento Bridget Jones” patrocinado por Monidala Ree D. Cool: Ahora con más vergüenza ajena!!
9 agosto, 2011 12 comentarios
Queridísimos amigos y desconocidos de Internet:
Hoy la desgracia ha cernido sus alas negras sobre mí y he padecido en mis carnes uno de los horrores más temidos por cualquier mujer que se precie de serlo. No, no se trata de que no haya sido capaz de encontrar un bolso que hiciera juego con mi último y definitivo par de sandalias, así que hacedme el favor, que el asunto es serio.
Volviendo del baño, una compañera (en adelante, Mi Salvadora) me ha alertado de que me estaba paseando por todita la oficina con mi elegante y vaporosa falda veraniega levantada y enganchada con la ropa interior y por lo tanto, luciendo con garbo una de las partes de mi anatomía que sólo podemos calificar como “íntima”, uséase, el cu-cu.
El primer pensamiento que me ha venido a la mente has sido para rememorar ese momento mañanero frente al cajón de la lencería y para maldecir mi suerte por no haber escogido una prenda con más tela.
El segundo pensamiento se ha concentrado en el control de daños: Dos factores me ha salvado milagrosamente del escarnio público: uno, que tengo un culito muy mono. Las cosas como son, si se tenía que ver algo, que fuera eso… Aunque ni que decir tiene que ya no podré seguir yendo por la vida fingiendo que no tengo celulitis…
Dos, que mis compañeros estaban todos tan concentrados en su trabajo y tan ajenos a mi impúdica demostración que creo que nadie me ha visto además de Mi Salvadora. No obstante, por la extraña sonrisa que me ha dedicado el tío de finanzas cuando me ha dado la nómina, sospecho que ha debido de disfrutar de una buena panorámica de mi cacha derecha. Hubiera sido de esperar el haber encontrado un pequeño extra en el salario mensual a modo de propina, pero no ha sido así. Otra vez será.
Os preguntaréis por qué os cuento esto, cuando el sentido común dicta que en situaciones de esta índole lo mejor es callarse cual meretriz y hacer como que no ha ocurrido (se dice que por menos de esto las Geishas se hacen el harakiri…). Si después de más de un año de blog y con lo que os he narrado hoy todavía no sabéis que soy una exhibicionista emocional (y de las otras) pues es que no me conocéis en absoluto.
Además, qué coño, que así nos reímos todos!