Moonrise Kingdom (Wes Anderson, 2012)
8 diciembre, 2012 2 comentarios
Hacía mucho tiempo que no entraba una película en la lista de «Pelis de culto personal y familiar». También hacía un millón de años que no disfrutaba de verdad una de Wes Anderson, de hecho creo que desde «Bottle Rocket» (por cierto, ¿por qué no hace más películas Luke Wilson?? ¿Esto es como cuándo me hice super fan de Emilio Estévez?) que fue para mí como esos flechazos que surgen al conocer a alguien y que haya una química genial pero por alguna extraña e incomprensible razón, en seguida queda claro que había sido un espejismo, un bluff de la vida…
El caso es que sus posteriores trabajos (y los he visto casi todos) no les he pillado nunca el hilo y me parecía que, a pesar del muy atractivo envoltorio, no había mucho mensaje y que Anderson no tenía derecho a reunir esos impresionantes elencos para que después los actores parecieran zombies todo el rato… Si, como comentaba con mi cinéfilo amigo Steppenwolf, ahora tengo que volver a verlas todas otra vez para saber si a la Monidala de hoy (también conocida como Mrs. Jones: «Señora, ¿tiene hora?» Sí, es la hora de cagarme en tu puta madre, niñato de mierrrrrrrrrrrrrrda…!) resulta que le divierte lo que antes le aburría, menuda trabajera me espera…
Pero «Moonrise Kingdom» nos ha encantado en casa (Victoria la ha seguido entera con mucho interés y riéndose bastante y eso que yo temía que en algún momento pudiera ocurrir algo traumático que no entendiera y que apareciera Tilda Swinton a quitarnos la custodia porque seguro que no es tolerada…). Su estética preciosista y retro, la ternura de la pareja protagonista (empiezo a creer que sólo en la infancia el amor verdadero tiene sentido…), su sentido del humor entre estoico y surrealista, Eduard Norton vestido de Boy Scoutt, una banda sonora chulísima… Vamos, que nos lo hemos pasado en grande!
Tranquila Monidala, que lo de La Pianista de Haneke sigue siendo mucho peor…
También me ha gustado el triángulo entre mi idolatrado Bill Murray, la siempre eficaz Frances McDormand y Bruce Willis (cada día mejor Bruce, me encanta como vas sembrando tu carrera de personajes memorables en películas de culto mientras sigues siendo John McClane y un Expendable sin prejuicios, eres grande!). Hay mucha verdad en esa historia…
Pero sobre todo, admira lo bien reflejado que está ese momento de la preadolescencia en el que todo va a empezar a hacerse muy raro y difícil y uno no puede evitar sublevarse contra todo y contra todos. Una suerte de síndrome premenstrual de varios años que, especialmente en las chicas (bueno, es de lo que yo puedo hablar…), es una alienación permanente y una impresión de que el mundo entero te está tres tallas más pequeño de lo adecuado. Creo que esto te dura hasta los cuarenta. Año arriba, año abajo.
Sin embargo esa sensación de ser demasiado adulto para ser tratado con condescendencia pero a la vez seguir esperando que alguien satisfaga nuestras infantiles necesidades de protección, no nos abandona nunca.
Mira que la pille pelín de «refilón». Pero este tipo de pelis de niños pre-adolecestes no sé que tienen pero me dan buen rollo. Y si sale Bruce pues +5 al canto X-D
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